miércoles, 19 de febrero de 2014

Murió el tío Simón…

Y como olvidar que fuiste el interprete de aquellas canciones que revoloteaban en las almas de quienes te escuchaba y es que si con tus cuentos, de niña unas cuantas veces escuche de tus andares y que  hasta me creí que eras mi tío, no sé porque nunca me preocupe por lo contrario,  aunque muchos ya sabemos de tu historia, hoy se escucho en el cielo cuando los ángeles Dijeron ¡Ya Llegó Simón! Y se ha formado la parranda, saltando de un galope tu querido caballo viejo con el que te encontraras y un abrazo  fraterno ambos se darán, también el  perro tan hermoso que jugueteaba con ella también a tu encontró salió, en un universo de cristal ira a ensillar su caballo pero nadie te olvidará a pesar de que pasen los años, y ya que sobre este suelo que estamos, Tierra del libertador allá en aquel lugar tan bonito te vibre el corazón y decirle a todos que a Venezuela la llevas en el corazón,  porque como nos dijiste Ser un buen venezolano, no es solamente haber nacido en esta tierra; Es respetarla, es abrazarla y es quererla, Y es el orgullo que se siente de tenerla , en nombre de mi Venezuela te digo es una gran bendición haberte tenido y que como yo tu también la quieras, Lucero de la mañana, préstame tu claridad Para alumbrarle los pasos, al tío querido que hoy   se va, le diré al lucero del alba que te vuelva a regresar porque habrá gran trabajo si tu hoy no estás, si tu querencia fue el monte, no dejare que dejes de cantar, porque en cada rincón de este país te harás escuchar, Es tu sombra  insinuante triste despedida, y mis ojos llorarán tu partida eres el tío grande, el tío que no se olvida, en este momento he soltado la risa aunque no tenga lugar, me he acordado cuando mi papa me conto del alcaraván, que cosa con tus ocurrencias, ahora donde quedaran? Escuchándolas solo en las calles pues bien son las historias más lindas que nadie podrá entonar. Y si pienso en la vaca mariposa, la verdad recuerdo que me imaginaba una linda vaca con alas de mariposa que llenaba a todos de alegría porque traía una vida, pero al pasar el tiempo entendí que nos hablabas del llegada de nuestro señor Jesucristo ¿qué cosas no?   Perdóname por no interpretar en esta nota, todos tus versos pero ya habrán otros en los que te he de recordar pues tus notas no mueren, ni mucho menos tu voz. Ya para despedir porque mis ojos se han llenado e lagrimas recordando nuevamente que al marcharte al cielo, hoy nos dejas  un vacio en alma sin dejar de decirte que dejaste a Venezuela, tu luz, tu aroma y ser escuchando de un cuatro cada sonido que nos llego a la sangre como la espuma del mar, ¡Dios te Bendiga Tío Simón! Fuiste, Eres y serás siempre grande.
Para el tio de Venezuela, El Gran Tio Simón 

Autor. Veronica Diaz

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